El verdadero ahorro es un fruto de buenas prácticas, de diligencia y sensatez, también de serenidad.
Pero sobre todo de madurez.
La suma de muchas cosas buenas, resulta en algo bueno.
Necesitamos disciplina y si quieren compromiso, pero con nosotros mismos y con nadie más.
Si renuncias a la disciplina y compromismo de ahorrar contigo mismo, y en cambio eres capaz de comprometerte con alguien más, una entidad financiera que ofrece planes de pensión por ejemplo o un sistema de tandas o piramidal, que no dista mucho…. en realidad estás declarando y pregonando que tu no vales nada, o al menos vales mucho menos que ellos.
Les has dado tu libertad.
Ahora esa semilla que tu mismo pusiste y que eventualmente crecerá con tu esfuerzo, dará sombra y frutos a quien le diste lo que tu mismo no fuiste capaz siquiera de enfrentar… de tomar en tus manos.
Te dio miedo…
¿Te imaginas un país que no tiene control de su propio dinero?
¿Crees que sería un país libre y soberano?
Si aún no te lo has imaginado, mira a los países de la Union Europea.
Toma compromisos, pero contigo mismo.
Ya aprenderás en el camino.
Y ten serenidad…


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